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Somos lo que Comemos: Un Enfoque Judio sobre Alimentos y Sustentabilidad

Por el  Rabbi Yonatan Neril

Rebbe Nachman de Breslov identifica el deseo por la comida y bebida como el deseo central del ser humano, y desde el cual los otros emanan. Las enseñanzas judías nos ayudan a apreciar la comida que comemos con un espiritu de santidad. Haciendo eso también podemos ayudar al medio ambiente, como lo exploraremos.

Que significa comer de una forma judía? Primero que nada, Debemos comer cuando tenemos hambre. El rabino Shlomo Volbe enseña que una persona necesita distinguir entre comer por un deseo saludable del cuerpo (i.e., comer en orden a estar saludable), versus comer en base a un deseo psicológico. 2 (Por supuesto que mucha gente hoy come por un deseo emocional). Por ello es importante tener en claro, antes de comer, que lo estoy haciendo por la razón correcta,3 en vez de por antojos físicos o emocionales.

No solo lo que comemos,  sino también es importante como comemos. Una forma judía de comer incluye hacerlo lentamente y a conciencia. Mientras que es posible comer una comida en unos pocos minutos, las enseñanzas judías nos enseñan lo contrario. el Rabino Natan de Breslov establece: «Ten cuidado de no tragar tu comida a prisa. Come a un ritmo moderado, calmadamente y con los mismos modales que mostrarías si estuviera presente un importante invitado. Deberías comer siempre de esta manera, incluso si estas solo. ”4

También importa donde comemos. En el Talmud, el Rabino Yochanan y Reish Lakish enseñan que la mesa de una persona tiene lugar en el tiempo de nuestros antepasados en expiación para esa persona. Una comprensión de su declaración cuando una persona come en la santidad de su propia mesa, han hecho un uso apropiado de sus mesas de un modo paralelo al del altar del Templo (Chagigah p. 27a). Esto pone en relieve la importancia del pensamiento judío sobre comer en una mesa, y no mientras se esta de pie o caminando. Hoy en dia, algunos de los lugares donde podemos llegar a comer son en un escritorio e incluso en un auto!. Comeremos mas sanamente y con mas santidad si lo hacemos en una mesa.  .

Finalmente, el acto de comer con otros – y compartir no solo comida, sino también sabiduría judía – otorga  la comida un aura de santidad, y eleva el comer a un acto santo. 5 En Pirkei Avot (Etica de los Padres 3:4) aprendemos


 

1 Likutei Moharan I, 62:5

2 Alei Shor

3 Rabbi Moshe Rafael Seror (contemporario, Israel) Sugiere una practica cuando sentimos del deseo de comer. Podemos preguntarnos a nosotros mismos si el deseo de comer que sentidos es por una comida especifica que nos gusta, por ejemplo chocolate, y si la sensación de hambre se extiende a los alimentos que no nos gusta. Si podemos sentir en nuestro cuerpo que el deseo es por esta ultima, entonces es hambre genuina de que nuestro cuerpo necesita alimento, y no una pantalla de humo por la inclinación que busca gratificación por comidas con azúcar grasas o alientos salados. 

4 Chayey Moharan #515, por el  Rabbi Natan Sternhartz, traduccion por R’ Avraham Greenbaum. En un sentido similar, Rabbi Tzadok Hacohen en la sección cinco de su tratado de «Tiempo de Comer» enseña sobre la importancia de la importancia de la moderación para atemperar el deseo de comer , tragar y terminar rápidamente. Cita el Talmud Tractate Berachot 2a-b, sobre como una persona debe prepararse antes de comer.

5 Similarmente , Rabbi Shlomo Riskin escribe acerca de «Comer – una Experiencia Religiosa» en Happening Haggadah el escribe «El seder puede servir como un modelo para enseñar una filosofía judía de comer. Nos permitimos tenemos solo una pequeña porción de karpas. Al retirarse rápidamente de la comida, aprendemos disciplina y restricción. Como seremos humanos debemos aprender auto-control para apartar la comida a un lado y hacer de ella una experiencia religiosa. Al aprender a no hacer lo que nos urge hacer, pero lo que El manda, servimos a D-s… En Pesaj nos convertimos en personas de D-s el cual su principal propósito es servirle.  Lo hacemos al subsumir lo físico a lo espiritual – convirtiendo nuestra comida en una experiencia de aprendizaje y oración. De hecho el aprendizaje y la oración son lo primero. Es a través de karpas que esta lección es llevada a los niños alrededor de la mesa del Seder». 


 

Que el Ravino Shimon diría: «Tres que comen en una mesa y hablan palabras de la Torah, es como si estuvieran comiendo en la mesa de D-s…» Una oportunidad compartida para bendecir antes o después de comer también sirve para conectar el acto de comer a un propósito mas elevado.6  Estas practicas elevan nuestras necesidades corporales y ayudan a transformar comer en un acto de santidad y devoción.

Como comemos, y consecuentemente, cuanto comemos, tiene una influencia en nuestra «huella ambiental», como muchos estudios lo dejan en claro. Los adultos en Estados Unidos  en promedio comen 500 calorías mas por día (como una hamburguesa grande) que como lo hacían en los 1970s. En EE.UU. la disponibilidad de la comida (el consumo de alimentos incluidos los desperdicios) aumento un 18%, requiriendo un adicional de 3.1% del total del consumo de energía así como también mas agua y tierra para producir comida.8 Para 2006, la agricultura contribuyo acerca del 20% de emisiones de gases invernadero globalmente, haciéndolo un mayor reto en la lucha por el cambio climático. 9 La producción moderna de comida y consumo también contribuye a la deforestacion de los bosques (para limpiar la tierra para el ganado y los cultivos) y contaminación del agua (por el uso de pesticidas y fertilizantes).

La expansión de la agricultura para satisfacer la creciente demanda de comer en exceso sólo exacerba estos impactos. Cuando comemos con mayor intención y conocimiento, consumiremos menos porque vamos a estar mas en sintonia con lo que nuestros cuerpos realmente necesitan. Esto reducirá también el impacto que nuestro consumo de comida tiene el medio ambiente. Traer conciencia y santidad a nuestro consumo de comida puede generar una sanación profunda en nosotros, en nuestra comunidad, y en nuestro planeta. A nivel individual, aquel que come de manera apropiada se siente mas sano y mas conectado con el Infinito. A nivel comunal, la conciencia para comer puede juntar a los miembros de la comunidad e inspirara otros a unirse a ella. A nivel global, el cambio que hacemos en el consumo de alimentos afectara a la gente, animales y plantas en lugares lejanos.  Podemos comer con intención, y al hacerlo, ayudar al mundo a acercarse a su estado perfecto. 10

Rabbi Yonatan Neril fundo y dirige Jewish Eco Seminars, que une y educa a la comunidad judía con sabiduría judía medioambiental. Desde 2006, ha trabajado con Canfei Nesharim en el desarrollo de recursos educativos relacionados con el judaísmo y el medio ambiente.

Este material fue producido como una parte del proyecto Jewcology. Jewcology.com es nuevo portal web para la comunidad judía global sobre medio ambiente. Gracias a la comunidad de ROI por su generoso apoyo, que hizo posible el proyecto Jewcology.


 

6 Rabbi Tzadok Hacohen, Pri Tzadik, Treatise on the Time of Eating, seccion seis.

7 «El incremento de la ingesta de alimentos explica por si sola el aumento de peso en los Estados Unidos,» Boyd Swinburn et al. presentación oral, 17 Congreso Europeo de Obesidad, 5.9.2009, noticias en linea en http://www.medicalnewstoday.com/articles/149553.php. Los investigadores consideran este aumento de consumo de comida ser la causa principal de la epidemia de obesidad.

8 “Luxus Consuo: Perdida de recursos alimentarios a través de la sobrealimentacion». Por el Dr. Dorothy Blair y Dr. Jeffery Sobal, Agricultura y Valores Humanos, Vol. 23, No. 1 (2006), p. 63-74

9 “Cambio Climatico y Agricultura», 2006, Martin Parry y Cynthia Rosenzweig, Panel Intergobernamental sobre Cambio Climatico  (U.K. Meteorological Office and Goddard Institute for Space Studies), en linea en  http://cgiar.biomirror.cn/pdf/agm06/agm06_ParryRosenzweig_climatechange%26agr.pdf

10 De hecho, Rebe Najman de Breslov enseña que la ingestión de Israel trae Di-s, bendito sea, y la Shejiná (Presencia Inmanente de) cara a cara (Likutei Moharan I 62:1).